Esta semana os traigo unas croquetas que os van a quitar el sentido. Unas croquetas cremosas deliciosas con un toque de curry que le confiere otro nivel. A mis hijos les encantan y a nosotros los más mayores que os voy a decir. Que son mi perdición. La base de la croqueta es con verduras y aunque yo he utilizado zanahoria, puerro y cebolla, podemos utilizar aquellas verduras que más nos gusten. De este modo obtendremos matices distintos según que verduras y hortalizas usemos.

INGREDIENTES
Medio pollo al ast
El jugo del pollo
1 puerro
1 zanahoria
1 cebolla tierna
Aceite de oliva virgen extra AOVE
Sal
Nuez moscada
1/2 litro de leche entera
100 g de mantequilla
25 g de harina
1 c/c de curry
Para el rebozado
2 huevos
Pan rallado
PASO A PASO
La preparación es bastante sencilla e idéntica que las croquetas de pollo al ast que os preparé la última vez, aunque en esta receta añadiremos un poquito de curry. En primer lugar vamos a cortar el puerro, la zanahoria y la cebolla y lo vamos a pochar. Una vez esté bien pochadita la vamos a triturar hasta que quede una pasta fina.
Seguidamente volvemos a poner en la sartén las verduras y le añadimos la mantequilla y la harina. Dejamos que la mantequilla se derrita y con unas varillas removemos hasta que se integre con las verduras y la harina. Una vez esté todo bien integrado vamos a añadir la leche bien caliente y seguimos removiendo hasta que se integre todo. Y por último haremos exactamente lo mismo con el pollo previamente picado y el jugo de este. Rectificamos de sal y añadimos una pizca de nuez moscada y una cucharadita de curry.

Cuando veamos que la mezcla empieza a ser consistente la verteremos en un pirex de cristal y dejaremos que se atempere un poco. Tapamos con film para que no se reseque la mezcla y la introducimos en el frigorífico hasta el día siguiente.
Al día siguiente sacaremos la mezcla. Si podéis poner el recipiente en el congelador durante una media hora sería fantástico, porque así podréis volear mejor las croquetas.
Ahora tan solo nos queda volear. Yo he preparado croquetas de entre 25 y 35 gramos. Cogemos una porción con una cuchara, voleamos y rebozamos con el huevo batido y el pan rallado. Así con toda la mezcla.
Por último, las guardamos en el congelador y ya las tenemos listas para utilizarlas cuando nos apetezcan.
