Inaugurado en el año 2000 por Aitor Inurrieta, L’Albereda Tapas es uno de los restaurantes más antiguos y con más solera de Valencia. Siempre se ha caracterizado por su fidelidad a la cocina tradicional, basándose en recetas de siempre, pero imbuidas de una personalidad propia.
Ahora, tras 17 años haciendo cocina clásica, su chef, Aitor, celebra su aniversario con un nuevo “Menú de Tapas Noche” con platos para compartir y disfrutar del auténtico tapeo tradicional con aires renovados. L’Albereda es una taberna a la antigua usanza, con una decoración donde cada uno de sus elementos están colocados para hacernos sentir en un espacio tradicional y acogedor. Aitor Inurrieta nace en Bayona aunque se traslada muy pronto a Madrid.
Su padre Enrique es el creador de una de las compañías de discos más importantes de España y su madre Ana María Iriarte figura ilustre de la lírica española, aún disfruta del arte de la música y del otro arte de la gastronomía creado por su hijo. Pronto se marcha Madrid, a estudiar en la Escuela de Hostelería y Turismo.
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| Ensaladilla rusa |
Tras su paso por diferentes escuelas y cocinas de prestigio, el amor lo trae a Valencia, donde desde hace ya 17 años toma las riendas de L’Albereda Tapas. Gran defensor de la cocina tradicional, de la “cuchara” y el “puchero”, Aitor ha apostado por una carta basada en la tradición actualizada, la calidad y el buen producto. Como buen vasco, las influencias de su tierra natal se trasladan a sus platos, pero con un aire renovado y muy mediterráneo, “porque nos hemos querido adaptar también a los gustos de esta tierra tan maravillosa que nos ha acogido” Aitor tiene claro que sus platos están hechos para gustar.
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| Mil hojas de foie y manzana |
Y es que en L’Albereda Tapas se disfruta como en pocos sitios de la auténtica cocina tradicional, sin mayores pretensiones que el gustar y proporcionar un poco de felicidad a los clientes. “Mi cocina no ha cambiado mucho, simplemente ha evolucionado, con unos toques de innovación en las técnicas de cocinado.
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| Pan de cristal con queso brie y gorgonzola |
El amor y el cuidado por el producto es la base de todo y eso no ha cambiado. Mantener las tradiciones de su elaboración, y el respeto al cliente y conseguir darle lo que quiere y que se sientan maravillosamente bien y vuelvan es mi objetivo” dice Aitor. Con una carta basada en platos tradicionales, destacan los platos de cuchara, como el cocido tradicional servido en dos vuelcos, plato estrella, que se elabora y se sirve los miércoles y jueves; la fabada asturiana, los callos, las alubias de Tolosa, las verdinas con marisco y verduras de temporada; de gran calidad son las carnes, que se pueden disfrutar estofadas, como las carrilleras de ternera ó el rabo de buey, ó simplemente a la brasa, como el secreto ibérico y el chuletón de buey trinchado de más de medio kilo de peso. Pescados del día traídos directamente de la lonja, preparados a la plancha, al vacío o en cocciones a baja temperatura para extraer al máximo su sabor y textura y acompañados de verduras de temporada.
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| Huevos con puntilla y jamón |
Tapas, montaditos, tostas, ensaladas, y chacinas ibéricas completan la propuesta gastronómica de L’Albereda Tapas. Mención aparte a los postres, uno de los pocos restaurantes valencianos que puede presumir de tener una carta completamente casera y de una grandísima calidad, destacan la tarta de queso, de chocolate, dulce de leche, creaciones artísticas con plátano, frambuesa ó chocolate blanco, y los helados. La carta de vinos cuenta una cuidada selección de bodegas de diferentes denominaciones de origen españolas: Rioja, Ribera del Duero, Rueda, Valencia, Albariño,… y se pueden disfrutar también por copas.
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| Postres caseros |
Además de un Menú del Día, en el que por 16,90€ se puede disfrutar de un snack de bienvenida, entrante, plato principal, postre o café con bebida y pan, con motivo de su 17º aniversario, L’Albereda Tapas ha incorporado un Menú de Tapas Noche, compuesto de 5 platos a compartir entre dos personas, postre y bebida a un competitivo precio de 15€, que se puede disfrutar las noches de martes a jueves, y que tiene como objetivo recuperar las tradicionales cenas entre amigos y/o familia de tapeo tradicional, de compartir y relajarse tras las duras jornada laborales.
