Verdad, es un gran vino, pero este vino esconde una bonita historia de esfuerzo y sacrificio por parte de un alumno con el que he tenido la fortuna de trabajar codo a codo durante muchos años. Por suerte, todos los alumnos te dejan su impronta, de igual modo que nosotros esperamos dejar la nuestra durante su etapa educativa y así que perdure durante todas sus vidas.
Como decía, he tenido la oportunidad de trabajar con Marc durante estos últimos años y como un vino que empieza a madurar en su barrica, Marc fue madurando y adquiriendo matices en nuestro centro. Matices con aromas a fruta roja, con tonos violáceos propios de su juventud. Un vino lleno de frescura.
Un alumno que como el vino que poco a poco se deja querer, se va domando para ofrecer un gran vino. Días de sol, días de frío, tormentas, viento y granizo han curtido estas cepas que cada año nos ofrecía mejores racimos.
Un trabajo coordinado y mimado desde el principio, para conseguir lo mejor de nuestro alumno. Con los años Marc llegará a ser un gran vino, un gran director, producto del trabajo realizado en los viñedos, donde sus padres han trabajado duramente codo a codo con nosotros para extraer la esencia de sus racimos.
Después de todos estos años es reconfortante observar como ha ido cogiendo cuerpo y personalidad propia. Marc ha llegado a su primera parada y vemos que como los grandes vinos, como hoy presentamos, evolucionará para dar paso a un vino elegante y con personalidad, donde esa fruta roja se habrá convertirá en fruta madura, tostados….. en un gran vino
EL VINO
Los reservas de Marqués de Riscal se elaboran, básicamente, a partir de uvas procedentes de viñas de la variedad Tempranillo plantadas antes de los años 70, situadas en los mejores suelos arcillosos, calcáreos de la Rioja Alavesa. Esta variedad soporta bien la crianza en madera y el envejecimiento en botella gracias a su buen equilibrio ácido y a su fina tanicidad. Las variedades Graciano y Mazuelo, cuyo porcentaje en la mezcla no sobrepasa el 10%, aportan frescura y viveza de color.
La fermentación se realiza a una temperatura controlada de 26ºC con un tiempo de maceración que no sobrepasa los 12 días. Los reservas de Riscal permanecen aproximadamente dos años en barrica de roble americano, configurando un vino que se encuadra dentro de los cánones del clasicismo riojano, fresco, fino, elegante y con un gran potencial de envejecimiento. Antes de salir al mercado tiene un periodo mínimo de afinamiento en botella de un año.
NOTAS DE CATA
Vino de color cereza bastante cubierto. Aroma balsámico y especiado de gran complejidad, con notas de frutos negros maduros y ligeramente tostadas. En boca tiene buena estructura, es sabroso, denso y con taninos redondos y elegantes. El final es largo y fresco, con un leve recuerdo de la madera de roble
Variedad de Uva: Tempranillo / Graciano / Mazuelo
Armonía: Este vino marida bien con jamón, quesos no muy curados, guisos con salsas no muy especiadas, legumbres cocidas o guisadas, aves, carnes rojas, carnes a la parrilla y asados.
Temperatura de servicio: entre 16º y 18ºC
Información extraída de la web de la bodega Marqués de Riscal