A lo largo de los últimos años ha habido un crecimiento exponencial de los creadores de recetas a través de las redes sociales. La gastronomía sigue estando de moda. Durante los años que llevo haciendo recetas me he encontrado con muchas personas que elaboran excepcionales. Personas consolidadas dentro de este mundo que son toda una institución. Es el caso de María José de Las Recetas de María José o el Comidista de Mikel López Iturriaga. Pero una persona que no deja indiferente a nadie es Pablo Albuerne o conocido también como Gipsy Chef. Un tío con un toque canalla y nómada de la cocina, que cuenta recetas en cualquier lugar y con los utensilios de cocina justos. Es la forma de demostrar que se puede cocinar en cualquier lugar y que lo puede hacer cualquier persona. Muy cercano y divertido, la verdad.
Pues bien, esta receta me encantó y aunque la Semana Santa ya haya pasado me apetecía hacer mi versión de sus torrijas con leche de coco y ron bañadas con chocolate y café. Bestial.
INGREDIENTES
Pan de leche duro
Leche de coco
Ron
Azúcar moreno
Ralladura de lima
Ralladura de naranja
Chocolate negro
Café
Canela
Mantequilla
PROCESO
En primer lugar le quitamos la corteza al pan y le damos la forma deseada. En un recipiente donde podamos mojar el pan añadiremos la leche de coco y un chorrito de ron. La proporción que yo he utilizado es de un vaso aproximadamente de leche de coco. Unos 250 ml de leche de coco y un chupito de ron. Al lado, añadiremos el azúcar moreno para rebozar el pan.
Mojamos el pan hasta que absorba bien la mezcla y a continuación rebozamos con el azúcar moreno. Una vez rebozada la marcaremos en una sartén. Para ello, añadiremos una cucharada de mantequilla y marcamos hasta que se dore con todas las partes. Tenéis que ir con cuidado que no se rompa al darle la vuelta. Una vez la tengamos la reservamos y vamos a preparar la cobertura.
Cogeremos unas 5 o 6 onzas de chocolate negro. Lo picamos y le añadimos canela, ralladura de lima y naranja al gusto. Añadimos un poco de café y removemos hasta que se derrita el chocolate. Finalmente vertemos por encima de la torrija y ya lo tenemos listo.
Y como bien dice Pablo Albuerne a lo Gipsy Chef, el resultado es bestial.